lunes, 17 de enero de 2011

Grupo de Infancia misionera en Villa Lía

GRUPO DE INFANCIA MISIONERA
“MENSAJEROS DE MARÍA”
Villa Lía – San Antonio de Areco


Testimonio:
Somos un grupo de Infancia Misionera llamado, “Mensajeros de María”. Vivimos en Villa Lía. El grupo está formado por unos 15 chicos, de los cuales once ya recibimos a Jesucristo en la Eucaristía. Nos guía y acompaña un matrimonio de nuestra comunidad, Nancy y Fernando; y otros padres, que se van sumando, de los que forman el grupo.
Comenzamos a misionar, visitando las casas en nuestro pueblo en el mes de agosto de 2010, acompañando frecuentemente a los abuelos del geriátrico. Llevábamos por los hogares mensajes de Nuestra Madre del Cielo, la Virgen María, la Palabra de Dios invitando a las familias a Misa, a la celebración de la Palabra o al rezo del Rosario. Tuvimos también una convivencia de tres días en nuestra Capilla San José, donde celebramos la Palabra cada día, rezamos el rosario, jugamos y también nos formamos aprendiendo más sobre Jesús y la Iglesia.
El 19 de enero haremos una “Campaña del rosario” por las calles de San Antonio de Areco, repartiendo rosario a los que pasen.
El 5 de febrero, Dios mediante, planeamos ir a misionar por tres días a Santa Coloma, partido de Baradero.
Nuestra fuerza es el rezo del Santo Rosario porque es lo que agrada a nuestra Madre y su Hijo Jesús.
La idea de armar este grupo misionero surgió porque vimos chicos jóvenes que vinieron a misionar de la Catedral Santa Florentina, de Campana, en las vacaciones de invierno pasadas. La visita de los chicos en las casas y por nuestro pueblo dejó una semilla que fue germinando de a poco: entusiasmo, ganas de conocer a Jesús y vivir como Él. Del 3 al 9 de enero del 2011 estuvo otra vez este grupo misionero de Campana y siguieron sembrando: aprendimos a animar a los más pequeños y a trasmitirles el Evangelio, a trabajar en equipo, aumentaron nuestras ganas de, como ellos, llevar a Jesús a los demás; y hasta dos muchachos del grupo de Infancia Misionera de Villa Lía se animaron a tocar la guitarra en las misas. Esperemos poder comenzar a formar nuestro propio coro, pues nadie se animaba a tocar la guitarra en nuestra capilla. Además 5 adolescentes se sumaron a nuestro grupo y si perseveran recibirán su la cruz misionera en cuaresma.
En la misa del sábado 8 de enero, en la que finalizó la misión, recibimos la cruz misionera todos los miembros del grupo. Las bendijeron y nos las entregaron el padre Marcelo Monteagudo, delegado diocesano para las misiones; el padre Santiago Whelan, párroco de nuestra parroquia de San Antonio de Padua en Areco, y el padre Agustín Villa, vicario de la Catedral, quien misionaba junto a los jóvenes. Queremos agradecer en particular a los padres Agustín, Hugo, Marcelo y a nuestro párroco, el padre Santiago, y todos los jóvenes que dedicaron esta semana a nuestra capilla. Gracias, y seguimos unidos en la oración.

Misión jóven en Villa Lía

Misión Joven 2011 - Catedral Santa Florentina
Villa Lía - San Antonio de Areco.

Los grupos de adolescentes y jóvenes mayores de la Parroquia Catedral Santa Florentina llevaron a cabo una Misión evangelizadora en Villa Lía, San Antonio de Areco, desde el lunes 3 de enero hasta el domingo 9 de enero. El lema fue “Ámense como Yo los he amado”. Durante estos días unos cincuenta jóvenes, acompañados por el Padre Agustín Villa, realizaron distintas actividades. Se alojaron en las instalaciones de la Escuela N° 13 y en los salones pertenecientes a la Capilla San José.
Ya en el mes de Agosto de 2010 se había realizado una pre-misión de 4 días en este pueblo, donde se visitaron las casas y se realizaron actividades con niños y jóvenes.
Al iniciar cada día, luego de la oración inicial y el desayuno, se realizaba una Adoración Eucarística para pedirle al Señor ser dóciles instrumentos en sus manos. Era un momento fundamental de la misión, pues era la ocasión para estar cerca del Señor Jesucristo para llevarlo a los demás.
Por la mañana, se visitaron las casas llevando el mensaje de Jesús a través de diálogos y oraciones que se realizaban con las familias. Se informaba sobre las actividades en la Capilla, la posibilidad de recibir los sacramentos y demás.
Por la tarde, un grupo de misioneros se encargaban de trabajar con niños; que día tras día se sumaban más y más para compartir catequesis a través de juegos. Realizaron un pesebre viviente, con la llegada de los “reyes magos”, que regalaron juguetes a los niños; y una obra de teatro de payasos. Otro grupo era destinado al trabajo con los jóvenes del pueblo con quienes compartían charlas, meriendas, fútbol y otros deportes, visitas a casas de otros jóvenes y así se iba transmitiendo la fe.
Luego de estas actividades, se rezaba el Santo Rosario caminando por las calles, al cual diariamente se sumaban más vecinos de la comunidad, después se celebraba la Santa Misa por distintas intenciones.
En esta oportunidad, los jóvenes visitaron también el Hogar de Ancianos de la Unidad Sanitaria donde viven alrededor de veinte abuelos. Compartieron un grato momento, tanto para los abuelos como para los jóvenes, con canciones, risas, charlas, historias y oraciones.
Se misionó además la zona rural, donde guiados por miembros de la comunidad de la Capilla y acompañados por el sacerdote se bendijeron casas y se compartió un lindo momento llevando la palabra de Dios a quienes hacia mucho no recibían visitas de este tipo.
En el trascurso de estos días el grupo misionero tuvo un retiro de silencio predicado por el Padre Agustín. Fue medio día, en el que se buscó tener un encuentro personal con el Señor, reflexionando sobre el llamado de Jesús a “estar con Él y enviarlos a predicar” (cfr. Mc. 3, 14) haciendo hincapié sobre el ser y comportarte como hijos de Dios. Fue una grata experiencia ver como los jóvenes son capaces de hacer silencio para adentrarse en sí mismos y en el diálogo con Dios.
El día sábado se realizó la Misa por la comunidad para concluír la misión. Durante la misma estuvieron confesando Monseñor Marcelo Monteagudo, Delegado episcopal para las misiones, y el Padre Santiago Whelan, párroco de la Pquia. San Antonio de Padua de San Antonio de Areco. Al finalizar, Mons. Marcelo, el padre Santiago y el padre Agustín bendijeron y entregaron las cruces a un grupo de niños de la Infancia misionera que se está formando. Fue una gran alegría para los misioneros poder compartir este momento pues, tal como los mismos niños misioneros y quienes los guían lo manifestaron, sintieron un gran impulso de armar este grupo a partir de la misión realizada en agosto pasado.
Además cinco niños, visitados esa semana, recibieron el Bautismo y un joven, que estuvo siempre presente, hizo su Primera Comunión, pues venía preparándose.
Para dar cierre a la misión de verano, en la noche del sábado se llevó a cabo un festival preparado por los mismos jóvenes, con gran participación de la comunidad: niños, familias y jóvenes. Hubo cantos populares, bailes folclóricos y también un dúo de hermanos (los hermanos Rosales, habitantes de Villa Lía) tocaron una chacarera y un carnavalito. Recibimos la visita de varios padres y familiares de los misioneros que se acercaron a compartir este momento junto a sus hijos, viendo ellos mismos su alegría y entusiasmo. Luego todos cenamos en el predio anexo de la Capilla.
Quiera Dios que esta misión nos ayude a todos, misioneros y misionados, a ser verdaderos discípulos de Jesús y a amarnos mutuamente como Él nos amó.




















PASCUA JOVEN 2010 EN CAMPANA

Durante el Triduo Pascual, del jueves 1 al sábado 3 de abril, se llevó a cabo la Pascua Joven 2010 en la ciudad de Campana.
Bajo el lema “Al tercer día… Resucitó” (Mt.20,19), jóvenes y adolescentes vivieron una Pascua diferente, con actividades que les permitieron vivirla más intensa y conscientemente.
El encuentro comenzó el Jueves Santo a las 18:00hs; donde tras la explicación de la Pascua y de la celebración del Lavatorio de pies e Institución de la Eucaristía en la Última Cena, nos dispusimos a vivir la Misa de la Cena del Señor. Luego se realizó la visita a los “siete monumentos”, donde se adoró a Jesús sacramentado. Acompañados por una gran cantidad de fieles, se visitó la Capilla Santa Bárbara; la casa de una familia, en representación de todos lo hogares; la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen, después la Parroquia de Nuestra Señora de Luján y de los apóstoles Pedro y Pablo, luego la Capilla de San Martín de Porres; el hospital, donde se pidió por todos los enfermos y trabajadores sanitarios; para terminar así en la Catedral Santa Florentina.
En cada Monumento que recorrimos; nos esperaba la comunidad para rezar junto a ellos y adorar al Santísimo Sacramento por diversas intenciones. Fueron alrededor de 3 horas de intensa caminata, fraternidad y oración.
El Viernes Santo comenzamos las actividades a las 16:00hs. Iniciamos con una explicación de la celebración de la Pasión del Señor y Adoración de la Cruz a cargo del padre Agustín Villa; y luego participamos de la misma.
Al terminar la celebración; miramos un Vía Crucis armado con fragmentos de la película “La Pasión de Cristo”, que nos dio lugar para reflexionar, haciendo un poco de desierto interior, sobre el la Cruz en nuestras vidas. Después pasamos a visitar al Cristo yacente, en la Cripta de la Catedral.
Finalizado ésto, nos unimos al resto de la comunidad para realizar el tradicional Vía Crucis que partió desde la Parroquia de Ntra. Sra. del Carmen hasta la Catedral Sta. Florentina., junto con nuestro Obispo, Mons. Oscar Sarlinga, y los sacerdotes de la ciudad.
Al finalizar el mismo, fuimos al colegio Santo Tomás de Aquino, donde realizamos una Cena penitencial y durante toda la noche Adoración a la Cruz. Hubo también muchas confesiones.
El Sábado Santo comenzó con gran entusiasmo en la espera de la resurrección. Por la mañana hicimos tres actividades misioneras: un grupo fue a visitar a los enfermos que se encontraban en el hospital de nuestra ciudad; otro grupo fue a un asilo de ancianos y un tercer grupo, recorrió las avenidas Mitre y Rocca realizando una panfleteada invitando a todas las personas que allí se encontraban a la misa de Vigilia Pascual. Fue un momento de gran alegría y testimonio cristiano.
Luego, regresamos al Colegio para almorzar y continuar con las actividades de esta Pascua joven.
Por la tarde se realizaron talleres simultáneos, donde los chicos podían aprender y ver las actitudes y acciones de las personas más cercanas a Jesús, así: la Virgen María, Juan, Simón de Cirene, María Magdalena, Pedro, Judas y Poncio Pilato.
Llegando ya al final realizamos una puesta en común de los talleres; donde los chicos debían identificarse con algún personaje y realizar un compromiso para esta Pascua.
Después nos dispusimos a vivir la Vigilia pascual en la Catedral Santta Florentina, donde celebramos la Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo.
Para concluir, luego de la Vigilia; compartimos una cena todos juntos en un ambiente de gran alegría pascual.
Realmente fue una pascua diferente; donde alrededor de 50 jóvenes y adolescentes se animaron a acompañar a Jesús en su camino hacia la Cruz; como también a contar y gritar que ese mismo Jesús resucitó y hoy vive entre nosotros.
Agradecemos a todas las personas que hicieron posible esta Pascua Joven y a todos los que nos acompañaron durante estos días.

martes, 17 de agosto de 2010

PRE- MISIÓN 2010
VILLA LÍA

Desde el miércoles 28 de julio al domingo 1º de agosto se llevó a cabo la misión evangelizadora realizada por los grupos de juveniles y jóvenes mayores de la Catedral Santa Florentina.
Impulsados por el Espíritu Santo y bajo el lema “Ámense como Yo los he amado”, partimos alrededor de 45 jóvenes, acompañados por el padre Agustín Villa, al pueblo de Villa Lía, perteneciente al partido de San Antonio de Areco. Estuvimos “parando” en las instalaciones de la Escuela Nº13 de dicha localidad.

Por las mañanas misionamos casa por casa, visitando a las familias que viven en el lugar, haciendo un reconocimiento de la zona, nueva para muchos de nosotros; compartiendo la alegría que sentimos por el hecho de ser cristianos y vivir en el amor de Cristo.
Durante las tarde teníamos actividades con niños y jóvenes. En cuanto a los niños, alrededor de 50 se acercaron todas las tardes para compartir juegos y conocer un poco más sobre la vida de la Iglesia. Para nosotros fue una gran alegría poder ver como estos nenes a medida que pasaban los días aprendían a hacer la señal de la Cruz , rezar el Padre Nuestro; el Ave María; y como se acercaban cada día un poquito más a Dios, uniéndose entre ellos superando divisiones y diferencias. Para ellos fueron unas vacaciones diferentes como también lo fueron para nosotros.

Con respecto a los jóvenes; durante los primeros días visitó las casas de algunos de ellos que están realizando la catequesis de confirmación en la Capilla; donde se pudo compartir un poco la experiencia y la alegría que significa ser joven y seguir a Cristo. Los demás días se llevaron a cabo distintos encuentros con ellos en el salón de Cáritas adjunto a la Capilla San José; donde se compartieron juegos, canciones y testimonios de vida.
El día sábado realizamos un encuentro con la comunidad: se compartieron charlas, merienda y las vivencias de cada uno, luego de la Santa Misa.
Además de estas actividades propiamente misioneras, el jueves realizamos un retiro espiritual (el primero para muchos), donde el tema central fue la necesidad de la oración para la vida cristiana. Fue toda una mañana de silencio donde, a través de material y reflexiones que el Padre Agustín nos daba, cada uno pudo, en el silencio personal, encontrarse con Dios en lo más íntimo. Ésto nos ayudó mucho, no solo como grupo y para la misión, ya que para que dé frutos uno debe estar en íntima relación con Dios para poder ser instrumento suyo, sino para nuestra vida cotidiana.
Por la tarde hubo tiempo también para charlas formativas acerca de San José; Patrono de la Iglesia y a quien dedicada la Capilla de Villa Lía. Conocimos más acerca de la vida de este gran Santo y reflexionamos acerca de su ejemplo de silencio, humildad y castidad.
Aprovechamos también para conocer un poco más acerca de la historia de nuestro país, de la ciudad de San Antonio de Areco y de Villa Lía, haciendo un recorrido por el Museo de antigüedades y una charla de sus dueños. Así conociendo mejor la realidad que llegábamos a evangelizar, pudimos hacer más “inculturizado” nuestro encuentro con la comunidad.
La fuerza principal durante estos días de misión fue la Adoración Eucarística diaria y la Santa Misa, en la que nos uníamos con el Jesucristo vivo y también con todos los que, en la distancia, estaban rezando por nosotros.
En el día jueves ofrecimos la Misa por todos los enfermos de Villa Lía. El día viernes, la ofrecimos por todos los difuntos. El sábado tuvimos la alegría de realzar, durante la Misa, un el bautismo de Iván, un niño que junto a su familia experimentó la cercanía de Dios y de la Iglesia.
Agradecemos a todo el pueblo de Villa Lía, que con un cálida bienvenida nos recibieron en sus hogares y nos ayudaron a realizar esta misión y con una alegre despedida entre cirenas de bomberos nos saludaron esperando, ellos y nosotros, la próxima misión, Dios mediante, durante en verano.
Así mismo agradecemos a toda la comunidad de Campana que con su oración y ayuda nos apoyó en esta misión.
Realmente fueron 5 días en los que vivimos muy cerca del amor de Dios y de los hermanos; y donde dimos todo para ser verdaderos instrumentos de Jesús y su Iglesia para poder así construir su Reino, experimentando que “hay más alegría en dar que en recibir”.
Quiera Dios que esta experiencia nos ayude a todos, misioneros y misionados, a ser verdaderos discípulos de Jesús en nuestra vida cotidiana.
Grupo de Jóvenes y Adolescentes Catedral Santa Florentina

lunes, 4 de mayo de 2009

VI Encuentro Diocesano de Jovenes

Queridos Chicas y Chicos:

Con alegría nos acercamos al "VI Encuentro Diocesano de Jóvenes". Esperamos que la información les haya llegado a todos y la hayan difundido (por las dudas se las vuelvo a adjuntar).

Estamos cada vez más convencidos que esta experiencia es fruto de la acción del Espíritu Santo y que es el Buen Pastor que quiere reunirnos "para estar con él y enviarnos a predicar" (Mc 3, 13). Así lo hizo al comienzo de su ministerio público y al final cuando envía el Espíritu a la comunidad reunida para transformarla en misionera (Jn 20,21-22).

Hoy se renueva esta experiencia: comunión y misión. Experiencia de nuestras pequeñas comunidades juveniles y de su trabajo misionero que realizan en sus lugares. Experiencia de amor y de lucha por llevar el Evangelio a todos, especialmente entre sus pares. Es la hermosa experiencia de vivir la Iglesia en estado de misión permanente.

Esto lo expresamos extraordinariamente como iglesia joven reunida junto a nuestro Obispo, imagen del Buen Pastor que nos convoca, dos veces al año: en el Encuentro y en la Misión Diocesana de Jóvenes.

Este año, además realizar el encuentro en el marco de la fiesta de Nuestra Patrona la Virgen de Luján, el Obispo consagrará nuestra diócesis al Sagrado Corazón de Jesús. Esta consagración nos ayuda a renovar la consagración de nuestras vidas que comenzó el día del bautismo; nos invita a estar más unidos e identificados con Jesucristo, deseando tener los sentimientos de su corazón. Queremos, a partir del encuentro con el Corazón Amante de Jesús, salir al mundo para construir la civilización del amor.

Para que puedas meditar personalmente y en comunidad, e ir entrando en clima para el 09 de mayo, te adjunto la carta que nos dirigió Mons. Oscar acerca del Sagrado Corazón de Jesús.En la espera de que podamos vernos aquel día y permaneciendo unidos en la oración, te envío un abrazo fraterno y bendiciones.


P. Hugo Lovatto
Delegado Diocesano de Pastoral Juventud.

miércoles, 4 de marzo de 2009

Cuaresma; cuarenta días para la Pascua

A partir del miércoles pasado, comenzamos la Cuaresma.
Quisimos usar este espacio para, no solo dar el significado de la misma, sino también ofrecer herramientas para poder vivir profundamente este tiempo litúrgico.
La Cuaresma es tiempo de conversión, que marca la Iglesia para prepararnos a la gran fiesta de la Pascua. Es tiempo para arrepentirnos de nuestros pecados y de cambiar algo de nosotros para ser mejores y poder vivir mas cerca de Cristo.

La duración de la Cuaresma está basada en el símbolo del número cuarenta en la Biblia. En ésta, se habla de los cuarenta días del diluvio, de los cuarenta años de la marcha del pueblo judío por el desierto, de los cuarenta días de Moisés y de Elías en la montaña, de los cuarenta días que pasó Jesús en el desierto antes de comenzar su vida pública, de los 400 años que duró la estancia de los judíos en Egipto.

Como bien dijimos, este es un tiempo de conversion; y para esto la Iglesia nos ofrece tres medios concretos: Oración , ayuno y caridad
Oración: en este tiempo es muy importante la oración en nuestra vida de Fe.
¿Cómo llego a una conversión sino hablo con con mi Padre celestial?. Es por eso que debemos proponernos una oración diaria; pero no esa oración de memoria que ya no tiene sentido en nuestras vidas y la repetimos sin ni siquiera prestar atención en lo que decimos; sino que nuestra oración debe ser más profunda; debe establecerce una relación de diálogo entre yo y Dios. Una oración profunda y sincera, que puede lograrce asistiendo a misa, leyendo el evangelio cotidiano, o simplemente dedicando tiempo de mi día exclusivamente a la oración.

Ayuno: No es solo no comer carne el miercoles de ceniza y el viernes santo; sino lo que se nos propone es un ayuno de corazon. Entrar en nosotros y ver esas cosas que no nos hacen libres, que nos cuesta y nos somete.
El ayuno no es solo evitar esas comidas que tanto nos gustan, sino tambien ayunar del maltrato a los demas, de las malas contestaciones... y cambiarlos por buenas actitudes hacia el prójimo y hacia nosotros mismos.

Caridad: Se refiere a realizar una obra de caridad con el necesitado. Pero a no confundirce; el necesitado no solo es la persona que vemos en la calle pidiendo monedas, o un nene pidiendo comida; el necesitado puede ser la persona mas cerca a mi; mi hermano, mi padre, mi madre o un simple amigo.
En este tiempo se nos propone estar al servicio de los démas; pero no solo escuchando, acompañando, sino también ofreciendo nuestros rencores, nuestros dolores y convertirnos en una mejor persona.

Como Jesús pasó 40 días por el desierto preparandose para su muerte y resurrección; nosotros debemos preparanos durante estos cuarenta días para morir y resusitar en una mejor vida; llena del amor de Cristo.

Les proponemos comenzar a caminar por el desierto... ¿Te animas?